El gobierno federal de Canadá dijo el día 14 que está listo para tomar "medidas de protección de emergencia" para restringir la importación de productos siderúrgicos extranjeros para proteger su industria siderúrgica nacional.
Bill Morneau, ministro de Finanzas de Canadá, anunció el anuncio a los medios de comunicación en una acería cerca de Toronto el mismo día. En virtud de la Ley de Aduanas de Canadá, las autoridades tienen derecho a utilizar "medidas de protección de emergencia" en "circunstancias excepcionales" cumpliendo las normas del comercio internacional, es decir, imponiendo aranceles adicionales o cuotas de importación antes de realizar las investigaciones pertinentes.
El gobierno canadiense tiene como objetivo siete tipos de productos de acero importados, incluidas placas de acero, barras de acero para hormigón, tuberías de energía, hojas laminadas en caliente, placas de acero prerrevestidas, alambres de acero inoxidable y varillas de alambre.
El gobierno canadiense nunca ha utilizado el término "medidas de protección de emergencia" en el pasado. Una vez “activada”, será la primera vez que el país adopte esta medida de protección comercial. El gobierno federal anunció que iniciaría una consulta pública de 15 días a partir del 14 de agosto.
A fines de mayo de este año, Canadá anunció que fortalecerá la implementación del sistema de marcado del país de origen para los productos de acero y aluminio importados con el fin de ser coherente con el sistema de marcado de los Estados Unidos.

Pero esto no permitió a Canadá obtener una exención continua de las barreras arancelarias estadounidenses sobre el acero y el aluminio. Desde el comienzo de los aranceles al acero y al aluminio en Estados Unidos, el gobierno canadiense ha impuesto aranceles de represalia a productos estadounidenses por valor de 16.6 millones de dólares canadienses, incluidos el acero y el aluminio, desde el 1 de julio de este año.

Mono dijo que las acciones estadounidenses habían creado "circunstancias especiales" que amenazaban a Canadá con la afluencia de acero extranjero barato. Añadió que las medidas de protección propuestas por la parte canadiense no eran específicas para países específicos sino para categorías específicas de productos para asegurar la estabilidad del mercado.
"El comercio internacional sin duda ha impulsado la economía canadiense", dijo Mono. "Pero debe ser justo y abierto, y debe beneficiar a todos".
Los datos oficiales canadienses muestran que en 2017, la industria canadiense del acero proporcionó alrededor de 23,000 puestos de trabajo para los canadienses y contribuyó con 4.2 millones de dólares al PIB de Canadá.